domingo, 11 de abril de 2010

Ratzinger demoró la expulsión de un sacerdote pederasta por "el bien de la Iglesia"

El abogado de las víctimas critica que le preocupara más "la reputación de la Iglesia que el bienestar de los niños".

El Papa Benedicto XVI demoró la expulsión de Stephen Kiesle, sacerdote estadounidense, declarado culpable de un delito de pederastia, argumentando que era "por el bien de la Iglesia". El abogado de las víctimas, Jeff Anderson, considera que "lo que se demuestra es que el entonces cardenal Ratzinger, no sólo demoró la expulsión del sacerdote, sino que prefirió proteger la reputación de la Iglesia por encima del bienestar de los niños".

En una carta escrita en latín, fechada en 1985 y que obra en poder de la agencia Associated Press, el Papa Benedicto XVI, que por entonces era prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, pidió al obispo de Oakland (California) más tiempo para considerar "el bien de la Iglesia" antes de tomar su decisión sobre la expulsión del sacerdote acusado de pederastia.

Anderson: "La Iglesia está por encima de los niños"

El abogado de las víctimas, Jeff Anderson, considera que "lo que estos documentos demuestran irrefutablemente, es que el entonces cardenal Ratzinger, no sólo demoró la expulsión de este sacerdote, sino que prefirió proteger la reputación de la Iglesia por encima del bienestar de los niños".

Finalmente, el letrado explicó que estos documentos sobre los abusos cometidos por Kiesle no habían salido a la luz antes porque los abogados estaban concentrados en demandar a la diócesis de Oakland, no al Vaticano.

fuente: DIARIO DE SEVILLA